Las redes sociales están por todos lados: en los hogares, centros comerciales, universidades, lugares públicos, etc. Hacia donde mires, la gente está usando redes sociales y están hablando de eso. Pareciera que cada semana surge un nuevo tipo de comunidad virtual.La pregunta es: ¿qué vamos a hacer los cristianos con todas estas oportunidades? Lo cierto es que no podemos permanecer ajenos a lo que ocurre a nuestro alrededor y debemos aprovechar estas herramientas para acercar a otros a Cristo.
La realidad es que crear contenido dentro de las redes sociales de tu congregación no es tan sencillo como parece, conozco algunas páginas de Facebook de iglesias donde el pastor comparte el auto nuevo que se compró o incluso la comida que pidió en el restaurante, por lo que debemos ser cuidadosos con lo que compartimos. Aquí te exponemos algunos consejos para comprender mejor el funcionamiento de las redes sociales de tu iglesia.
5 Consejos para el uso adecuado de las redes sociales en tu congregación:
1. Si realmente quieres tener impacto, debes pagar.
Muchas personas que inician con una página de Facebook creen que se trata de acumular likes, y existe la creencia de que mientras más likes tenga mi publicación, más personas podrán verlo. En realidad Facebook no brinda servicios gratuitos sin nada a cambio, además de que va a depender mucho de la creatividad de tu anuncio para tener mayor probabilidad de ser compartido y comentado. Si realmente quieres tener impacto en alguno de tus eventos, no es suficiente subir una imagen en tu muro y pedirle a 25 amigos que le den like, debes pagar a Facebook para que distribuya tu anuncio y así más personas podrán verlo además de tus amigos.
2. Coloca contenido interesante en tu red social.
Es importante que además del versículo del día, te des a la tarea de compartir información relevante como recursos para líderes, artículos interesantes, videos educativos, etc. Esto no sólo enriquecerá tus redes, sino que estarán aportando algo interesante y de crecimiento espiritual para otros.
3. Lo que no se actualiza, pierde importancia.
En el mundo empresarial lo recomendable es publicar tres veces al día; sin embargo, puedes hacer un post cada dos días. Recuerda que si abandonas tus redes sociales, las personas dejarán de visitarlas. Mantener el interés de los visitantes a tus redes es crucial para contar con ellos cuando requieras comunicar información importante.
4. Ten cuidado de a quién delegas la administración de tus redes sociales.
Lo más recomendable es que sea el pastor principal o alguno de los líderes de confianza quienes tengan la facultad para postear en redes sociales. Debemos ser cuidadosos al publicar información equivocada, que vaya en contra de nuestros principios e incluso de nuestra identidad como iglesia; de igual forma, la redacción debería estar siempre escrita en tercera persona y de forma incluyente, por ejemplo: -Te invitamos a participar en nuestro evento de fin de año. En lugar de escribir: Te invito a que participes en el evento de fin de año, recordemos que estamos hablando en nombre de una organización y no de una persona en particular.
Si delegas esta función a uno de tus líderes, recuerda que debe ser una persona de extrema confianza, ya que si en algún momento esa persona se retira de tu iglesia por diferencias o problemas, podría usar tu red social para afectar a tu congregación y a los miembros.
5. Utiliza un diseño e imágenes adecuadas.
Apóyate con alguno de los jóvenes de tu iglesia para tomar fotografías de calidad, a los chicos les encanta aportar algo a sus congregaciones que tenga impacto. Cuida que las fotografías no se vean borrosas, con poca luz, etc. También debes tratar de que los diseños promocionales de tus eventos tengan la mejor calidad posible, recuerda que como hijos de Dios debes buscar hacer todo con excelencia. Debes destinar parte de los recursos de un evento a la contratación de un diseño adecuado.
Hoy por hoy, casi todas las personas cuentan con un dispositivo con conexión a internet, por lo que hay que perfeccionar el uso que le damos a las redes sociales de nuestras iglesias.
Por Lic. Abraham Mayoral H.
Centro de Integración Agua viva, A.C.
